martes, 11 de septiembre de 2007

Final de viaje

Y después de tanta emoción, puestos a reflexionar, tocaba la hora de decidir qué hacer...
Mi cabeza era una olla a presión; mi corazón, un estanque de aguas mansas y cristalinas, del color de sus ojos.
Hacía años que no sentía tanta paz en mi interior ¿Sería la recompensa a tantos años de añoranza?

Nunca acepté tener un amor "furtivo". La experiencia vivida en mi casa con mis padres ya fue más que suficiente para evitar cualquier intento. Pero en mi mente siempre había un pensamiento, quizás un temor..."¿y si fuera ella?"

Esa mezcla de reflexión-pensamiento, temor-deseo, siempre había estado ahí. Sabía que podía amar mucho más de lo que estaba amando, que debía haber quien recibiera mi amor de pleno, con los brazos abiertos. Sabía que amar a otra mujer sólo era posible con ELLA.
(He tenido que rectificar después de publicarlo: No es correcto hablar de "amar a otra mujer", más bien se trata de volver a amar a la mujer que siempre amé.)

Pero ahora nos quedaba un camino lleno de espinas. Sobre todo a ella, que había perdido la libertad que tenía, que se sentía amenazada y vigilada y había expuesto tanto y tanto que me atormentaba pensando lo egoista que era yo.
Pero no podía hacer nada. Mi corazón paralizaba cualquier intento de apartarme de María.

Hilario Camacho publicó ésta canción en su álbum "La mirada del espejo" en 1981. La canción se llama "Final de viaje"
Este disco siempre lo he tenido guardado en mi corazón, en un rincón lejos de cualquier mirada.

Esta canción siempre me recordó lo que no fué y pudo haber sido, era un lamento que yo cantaba y lloraba a partes iguales, era el reconocimiento y la desesperanza, hasta que María me aceptó de nuevo en su vida...

Al final, vuelvo la vista atrás.
Fue tan cansado el largo viaje,
tan pesado el equipaje,
para llegar aquí, perdido en la ciudad,
soy prisionero en una calle
sin farolas, sin portales,
donde esperar que nazca de nuevo el sol,
que entre caliente por mi cuerpo
y haga sentirme que amanezco.
Vuelvo la vista atrás,
lo acabo de comprender,
he pasado de largo y el final de mi viaje
sólo puedes ser tú.
Sólo tú puedes ser
el portal de ese amanecer,
el único aliento que se adentra en mi cuerpo
fundiendo mi soledad.

TE AMO